¿Qué falta en mi maleta?

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Llega el otoño y con él una nueva etapa. Normalmente el mes de septiembre es un momento de cambio. Estamos acostumbrados a llevar nuestra vida según los cursos escolares y, si bien es cierto que hacemos propósitos para el año nuevo, tendemos a proponernos retos justo cuando acaba el verano, puede que como recuerdo a nuestros años de infancia y juventud, etapas de la vida que sí están regidas por el inicio del colegio, instituto, universidad, etc. Así que si este año haces borrón y cuenta nueva, desde Over The Rainbow te ayudamos a hacer las maletas.

Ya seas un estudiante que se marcha a una ciudad/país diferente para estudiar, un profesional que se va a otro lugar o empresa a trabajar o simplemente una persona que se lanza a la aventura de lo que el mundo pueda ofrecerle, aquí tienes una lista general de cosas imprescindibles:


Un diccionario. Te será muy útil si te vas a un país en el que se habla otro idioma. Sin embargo, no es necesario que cargues con él en los tiempos que corren. Descárgate la APP del diccionario que más te guste y tendrás el vocabulario que necesites en tu teléfono en cualquier momento. Date cuenta de que hay APP´s que funcionan sólo con Internet (Wordreference), así que si planeas hacer un viaje donde no siempre tengas wifi o datos en el móvil, puedes descargarte un diccionario que funcione offline (JibbiGo, WayGo).

Ebook. Si te gusta leer, pero no quieres llevar encima libros y libros, sin duda, necesitas un e-book. Los libros electrónicos te permiten cargar cientos de novelas, ensayos, poemarios e, incluso, documentos como apuntes o artículos en un dispositivo de 200 gramos.

Mapa. Si vas a un lugar que no conoces, los primeros días tendrás que consultar cómo llegar a los sitios. Con la APP Here WeGo no necesitas guardar ese desplegable gigante que nos vuelve a todos locos. Además, funciona offline.


Una toalla. Puede que el lugar al que vayas esté surtido con ropa de cama y baño, pero nunca está de más meter una toalla pequeña por si acaso.

Cepillo de dientes. En cualquier lugar podrás comprar uno, pero si lo llevas podrás usarlo el día de tu llegada e, incluso, durante el viaje.

Cargador del móvil. Al igual que el cepillo de dientes, podrás comprar uno fácilmente, pero mejor prevenir que curar y tener batería durante el viaje y el primer día de tu estancia fuera de casa.

Un adaptador de enchufes. Comprueba el tipo de clavija, toma de corriente y enchufe que se usa en tu destino para saber si necesitas comprar un adaptador. En esta página puedes consultar todos estos datos por países.


Chanclas. Apenas ocupan y te permitirán ducharte allá adonde vayas o calzar más ligero y fresco un día de calor. Incluso, te pueden servir de zapatillas de andar por casa mientras no tengas unas.

Bañador. El día que menos te lo esperes harás una excursión al río, a la playa o querrás ir a nadar unos largos a la piscina del gimnasio. Si lo llevas desde casa, no tendrás que decir que no a esos planes o preocuparte por comprarlo.

Cash. Lleva dinero en efectivo suficiente. Puede que lo necesites durante el viaje. Los imprevistos surgen cuando menos te lo esperas y quién sabe si has de coger un taxi porque llegas tarde al aeropuerto o si, una vez allí, tu vuelo se retrasa y quieres comer algo.



Medicinas. Si tienes medicamentos pautados de difícil acceso o en ocasiones necesitas alguno en especial, por ejemplo si tienes asma, lleva un pequeño botiquín con tus pastillas, inhalador, pomada, etc. De esta manera, no te quedarás sin ellos y no correrás el riesgo de no encontrarlos en tu destino.

Documentación. Haz una copia de tu pasaporte (y otros documentos importantes) y guárdala en un lugar distinto a este.

Bloc de notas y boli. Pareja indispensable para cualquier viaje que se precie. Puede servirte de diario, como agenda, para tomar apuntes de cosas que te interesan, para dibujar o escribir historias... Empieza por anotar los dos o tres números de teléfono que necesitas saber si pierdes el móvil y la dirección a la que te diriges.


En cualquier caso, trata de viajar ligero. Tenemos la manía de llevar más cosas de las que realmente necesitamos y muchas veces  ni siquiera les damos uso durante el viaje. Haz la maleta y retira al menos un 25 % de las cosas que has metido. Además, si te vas por un período de tiempo largo, probablemente te irás haciendo con bienes que quieras traer de vuelta a casa. Ese espacio de más que dejas en la maleta te será muy útil el día de tu retorno.

Y ahora que ya has hecho la maleta, coge aire, sonríe, agárrala por el asa y camina hacia tu nueva aventura.


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